Podemos reconocerlo por un ligero abultamiento , rojez y calor local.
El diagnóstico acertado se realizará con un radiografía bilateral para poder evaluar la estructura osea de los dos talones.
El tratamiento consisitirá en:
-hielo
-estiramientos del tendón de aquiles
-reposo de actividad física en el caso de deportistas
-modificar el tipo de calzado
-ultrasonidos u ondas de choque
Si no mejora con el tratamiento de fisioterapia lo siguiente sería el quirúrjico(calcaneoplastia)
El posoperatorio es bastante bueno, se permite la carga al día siguiente y comenzar con fisioterapia de tobillo. Se recomienda apoyo con muletas o bastones durante dos semanas.
