Hospital Gregorio Marañón y UEM
19/08/2011
Sorprendentes resultados del estudio “Potenciación muscular en nonagenarios”
El Hospital Gregorio Marañón, la Universidad Europea de Madrid y la Residencia privada “Los Nogales-Pacífico”, han elaborado el estudio “Potenciación muscular en nonagenarios”. Los resultados demuestran que realizar a esta edad ejercicios de fortalecimiento de la musculatura, aumenta considerablemente la fuerza de los mayores y atenúa o revierte la discapacidad. Munideporte le ofrece un resumen.Se trata de un trabajo de investigación aleatorizado, donde se ha contado con la participación de 40 ancianos, todos ellos mayores de 90 años y que viven en la Residencia Los Nogales-Pacífico. Es una iniciativa pionera en España, cuyos resultados han demostrado como un programa de fortalecimiento muscular, centrado principalmente en los miembros inferiores, consigue aumentar la fuerza en las piernas y disminuye la incidencia de caídas de las personas mayores.
El programa llevado a cabo para este estudio incluía la realización de tres sesiones semanales durante un periodo de ocho semanas. Básicamente, consistía en fortalecer la musculatura extensora de las piernas (cuádriceps) utilizando una máquina específica. Los participantes realizaban dos o tres series de ocho a diez repeticiones con un descanso máximo de dos minutos entre cada serie.
La carga iba aumentando progresivamente con el paso de las semanas. Se iniciaba con el 30% del peso máximo que eran capaces de mover una sola vez. Al final del proyecto llegaron a alcanzar hasta el 70%. Asimismo se realizaban ejercicios para fortalecer otros grupos musculares como los bíceps, tríceps, deltoides o gemelos.
Mediante los ejercicios de fortalecimiento muscular se consiguió aumentar la fuerza en las piernas y disminuir la incidencia de caídas. A las cuatro semanas de haber finalizado el programa, la diferencia había desaparecido, lo que indicó que al cesar la actividad física, el músculo vuelve a atrofiarse y a perder fuerza.
El responsable del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid para este proyecto ha sido el doctor José Antonio Serra, Jefe del Servicio de Geriatría. En el programa "Al Límite" de Radio Marca afirmó que "los hallazgos conseguidos en este estudio vienen a insistir en la idea de que la actividad física habitual, especialmente los ejercicios de potenciación muscular, son factibles y útiles durante toda la vida. Es necesario generalizar la práctica de la actividad física entre los mayores, por los enormes beneficios que reporta a su salud". El doctor Serra, además, indicó que "la prevención a través de la actividad física y los hábitos saludables supondría un gran beneficio económico a la sanidad pública, por lo que habría que activar programas en este sentido".
Por la Universidad Europea de Madrid ha participado el catedrático de fisiología del esfuerzo, Alejandro Lucía, que coordinó un equipo multidisciplinar compuesto por médicos geriatras, médicos deportivos, fisioterapeutas, psicólogos, animadoras socioculturales, etc. Prueba de la relevancia de este estudio, es su publicación en la Revista de la Sociedad Americana de Geriatría, una de las mejores del mundo en este campo.
Munideporte.com le ofrece como documento adjunto un resumen del estudio “Potenciación muscular en nonagenarios”.
Potenciación Muscular en Nonagenarios
El
programa realizado tres días en semana durante ocho semanas, consistía
básicamente en el fortalecimiento de la musculatura extensora de las
piernas (cuadriceps) utilizando una máquina específica (prensa de
piernas). Los participantes realizaban dos o tres series de 8-10
repeticiones con un descanso de 1-2 minutos entre las series. La carga a
mover iba aumentando progresivamente a lo largo de programa. Se
iniciaba con un 30% de lo máximo que podían mover una sola vez, llegando
a alcanzarse hasta el 70% al final del programa. Asimismo se realizaban
ejercicios de fortalecimiento de otros grupos musculares, bíceps,
tríceps, deltoides, gemelos, etc. Cada sesión duraba unos 45-50 minutos y
se iniciaba y terminaba con unos ejercicios de calentamiento y
enfriamiento (5-7 minutos), básicamente estiramientos de los principales
grupos musculares. Tras el calentamiento se realizaban unos 5-15
minutos de entrenamiento aeróbico con bicicleta estática. Se realizaron
mediciones (fuerza muscular en piernas, y test funcionales de velocidad
de marcha o de velocidad de subir escaleras, el número de caídas que se
producían durante el programa, etc) antes del programa, al finalizar el
programa y a las 4 semanas de haberlo finalizado para ver la evolución
de los logros conseguidos.
Mediante este programa de fortalecimiento muscular hemos conseguido
aumentar la fuerza en las piernas (10.6 Kg en el grupo de intervención
en comparación con el grupo control) y disminuir la incidencia de caídas
(1.2 menos en el grupo de intervención). A las cuatro semanas de haber
finalizado el programa, la diferencia había desaparecido, queriendo
indicar que al cesar la actividad física el músculo vuelve a atrofiarse y
a perder fuerza.
Este estudio tiene varios aspectos que le hacen ser especialmente relevante.
- El programa de actividad física fue supervisado en todo momento por especialistas en medicina deportiva y fisioterapia
- Antes
de empezar el estudio y realizar las medidas, se realizó un periodo de
familiarización con las máquinas de ejercicio que es necesario para que
las determinaciones sean fiables, ya que elimina el posible efecto de
que el grupo de intervención tenga unos valores más altos por el
“aprendizaje” en el uso de los aparatos.
- Haber
realizado nuevamente las medidas a las cuatro semanas de terminar el
programa nos permite demostrar cómo los beneficios obtenidos se pierden
al dejar de hacer ejercicio.
- La
adherencia al programa ha sido muy alta, con una media del 74%,
queriendo decir que se completaron una media de 18 sesiones sobre un
total de 24 programadas.
- No hubo
efectos adversos importantes en los que realizaron el programa. Algunos
participantes se quejaron de dolor muscular leve asociado a los
ejercicios de prensa de piernas, que no les impidieron seguir realizando
la actividad.
En
resumen, un programa de entrenamiento supervisado, relativamente corto
(8 semanas), centrado básicamente en ejercicios de potenciación muscular
de las piernas, de intensidad leve-moderada, es suficiente para inducir
beneficios significativos en la potencia muscular y en el riesgo de
caídas en nonagenarios que viven en una residencia de ancianos. Estos
hallazgos vienen a insistir en la idea de que la actividad física
habitual, especialmente los ejercicios de potenciación muscular, son
factibles y útiles durante toda la vida.
Si quieren proporcionar un beneficio a los nonagenarios sin oportunidad de acceder a sesiones controladas y con dotación de máquinas ¿porqué no divulgan algún tipo de información que nos permita realizar los ejercicios oportunos en nuestros domicilios?
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